4. El taller

Algo nerviosa, acude a realizar el taller. No está lleno, pero me da igual.

- Otra vieja hablando de sexo...

- Sí, van salidas...

Pues esto y más es lo que hay que aguantar. Odiadores, competencia, envidias... Pocas personas son equipo, especialmente en trabajo y, sobretodo, cuando toca el tema de Sexología.

Me presento.

- ,...y doy las gracias por poder daros esta conferencia, la primera del año. Serán 4, a no ser que haya cambios. Hoy podríamos hablar del Amor... ¿Qué es para ti, el Amor?

Empiezo preguntando a una chica. Y luego a otra, y otra, todas quieren hablar... Alguna lleva la sudadera, y otra, un llavero de la tienda. Me encanta. La conferencia se vuelve coloquio: exposiciones, opiniones, casos, hipótesis, ideas, supuestos, sensaciones, sentimientos, pensamientos...

Muy bonito. Así suena, así es.

Tras la charla, me retiro. Oigo como las chicas planifican, juntas, ir de cena. Ha sido perfecto. Lo soñado, lo que alguna vez planifiqué: un grupo atento, que opina, comenta, dice, expone y comentamos. Aunque las guíe, les dejo hablar, y expresar... Corregir, en caso de equivocarse, de algún grave error o decir alguna locura. Son jóvenes, y si quieren experimentar, es igual de válido que la que ya quiere un compromiso serio. 

Bajo con el bus, como siempre, sentada en última fila y, cuando me giro a la ventana, el grupo de chicas me saluda y grita:"Gracias, profe".

Hablo con Eva, ha habido ventas: "pero ya el lunes, por fa, quiero desconectar".Y una casa, un gato, una película y una sonrisa me acompañan el resto de noche.